En este otoño lleno de ocres tuve la suerte de perderme y encontrarme con esta pareja.
Que regalo reencontrarme con ellos y Mía, que ya ha nacido, tendrá la posibilidad de recordar junto a sus padres, como la esperaban, como la sentían y como estaban días antes de poder abrazarla.
Bienvenida a esta parte del mundo pequeña valiente.