Ayer se celebró el Losar (en tibetano «año nuevo»).
Fuego, música, bendiciones y prosperidad para dar la entrada al 2146 en el año del CERDO de TIERRA.
Dicen que vienen tiempo fértiles y felices.
En el templo de Dag Shang Kagyu (Panillo, Huesca) se festejó con plegarias del linaje Shangpa.
Sea cual sea tu propósito para este nuevo año que tengas coraje para aceptar al cambio y calma en el aprendizaje.